Retirada de la caseta de obra y aparición de grandes humedades
Ayer recibimos un aviso diciendo que estaban retirando la caseta de obra y el baño químico anexo, que estaban colocados frente a los andamios del Beti-Jai. Hoy nos hemos pasado a documentarlo. La verdad es que tanto quita y pon nos tiene desconcertados. ¿Comenzarán alguna vez las obras?, ¿Habrá entregado ya las llaves la propiedad?
Como curiosidad hoy os comentamos que, por la información que vamos recibiendo de todos aquellos que nos echan un cable, los dueños del frontón son empresarios del País Vasco probablemente relacionados con la gestión de frontones y de las apuestas que en ellos se realizan. Sabemos también de sus intentos por evitar la difusión de la historia del Beti-Jai en Euskadi por la mala imágen que para ellos supondría, y como no, para no perder el negocio. ¿No se les caerá algún día la cara de verguenza por lo que están haciendo?
Nos resulta muy curiosa ésta ambigüedad. Empresarios vascos, con negocios relacionados con la pelota vasca, y probablemente autoproclamados defensores de éste deporte, de su historia y de la cultura asociada a él. Pero otra parte empresarios inmobiliarios que están dispuestos a hacer cualquier cosa por rentabilizar su inversión, aunque sea destruyendo el frontón industrial más antiguo del mundo. Los negocios son los negocios por encima de la identidad. El dinero no conoce banderas.
Por otra parte, y como consecuencia de las constantes lluvias de estas semanas, han aparecido en la fachada principal dos grandes humedades. Una en la zona de la iquierda de la fachada y otra en el balcón central de la fachada. Estamos ansiosos porque empiecen cuanto antes las obras de consolidación y que todas estas deficiencias que el Beti-Jai presenta sean subsanadas.